El fondo de inversión Soft Bank ha invertido USD 375 millones en la empresa estadounidense Zume. La compañía, cuya sede se encuentra en Mountain View, California, ha sido valuada en USD 1,500 millones.
Hasta aquí se trata de otra inversión más en el mundo de la tecnología, pero el caso es más particular por dos motivos. El primero es que Zume se dedica a fabricar robots que cocinan pizza. El segundo es que el fondo de inversión tiene como mayor participante al gobierno de Arabia Saudita, con unos USD 100 mil millones.
La pizza robotizada
Zume afirma que su objetivo es descubrir mejores maneras de alimentar a las personas, y para eso trabaja en la creación de pizza artesanal a través de robots. La compañía también argumenta que hay más necesidad de trabajo (en los Estados Unidos) que personas para suplir los puestos, la solución: robots.
La empresa emplea robots tanto en la cocina como en la carga de los alimentos. La distribución se realiza con un método más tradicionales, los conductores de los vehículos son personas. Sin embargo, existe un detalle importante, las pizzas todavía no han pasado por el horno.
Los vehículos de Zume son grandes camionetas con varios hornos. Un programa especial calcula la mejor ruta para la distribución y el tiempo en que se realizará cada entrega. En base a esta información se programan los hornos para que comiencen a cocinar en el mejor momento, de forma tal de entregar la pizza recién hecha.
Como las pizzas se cocinan en los vehículos Zume tiene una gran facilidad para llegar a más clientes a pesar de las distancias y sin la necesidad de abrir más locales.
Arabia Saudita como inversor
La inversión en Zume es un anuncio complicado para la empresa. El Gobierno saudita ha sido acusado del asesinato del periodista Jamal Khashoggi. Por esta razón muchas empresas tecnológicas no asistieron a la conferencia tecnológica realizada en Arabia Saudita en el mes de octubre.
