Con todo el buzz sobre los equipos y software orientados a la realidad virtual, Samsung no podía quedarse afuera y aprovechó la feria FIA en Berlín para presentar su nuevo hardware: el Gear VR.
Seguramente a causa de su condición de líder del mercado mobile, Samsung diseñó el set de lentes de VR de forma particular: el headset se conecta directamente con el recientemente anunciado Samsung Galaxy Note 4.
De esta forma, si bien el Gear VR contiene numerosos sensores para detectar el ambiente alrededor, son en realidad la batería y el procesador del Note los que hacen el trabajo pesado. Una vez que la phablet se conecta al Gear VR, es el mismo display del Note el que reproduce las imágenes.
Por lo demás, Samsung utiliza los servicios de Oculus (como la tienda de la compañía) para ofrecer contenido a los usuarios, quienes también tendrán acceso a conciertos y tours de ciudades a 360 grados, un recorrido por el laboratorio de Tony Stark (gracias a un acuerdo alcanzado entre Samsung y Marvel), así como videos de presentaciones del Cirque Du Soleil o Zarkana, entre otras cosas.
En las pruebas realizadas, tal parece que la dupla Gear VR/Note 4 se maneja lo suficientemente bien. Si bien la calidad no podría nunca compararse con otros equipos (como el proyecto Morpheus de Sony o el mismo Oculus Rift), considerando que el trabajo lo realiza un smartphone, los resultados parecen ser impresionantes.
Sumado a esto, el Gear VR estaría disponible para los consumidores este mismo año, adelantándose de una forma ingeniosa a la competencia, con el apoyo de Oculus y su tienda para asegurar la seriedad del proyecto. Por lo pronto, aún no se sabe cuánto costará ni la fecha concreta de su lanzamiento.
Vía: Tech Crunch, Engadget
