Japón aprobó una enmienda a la ley de telecomunicaciones que le permite a los empleados del gobierno infiltrarse en los dispositivos IOT inseguros. Este tipo de acción estará a cargo del Instituto Nacional de Tecnología de la Información y las Comunicaciones y contará con la supervisión del Ministerio de Asuntos Internos y Comunicaciones.
El objetivo de esta iniciativa es mejorar el nivel de seguridad de los dispositivos mencionados para el año 2020, que será cuando la ciudad de Tokio se convertirá en sede de los Juegos Olímpicos. Los ataques controlados por parte del gobierno, cuando sean exitosos, servirían como advertencia para prevenir ataques de mayor magnitud.
Los operarios utilizarán diccionarios de contraseñas predeterminadas para tratar de ingresar en los dispositivos de los ciudadanos japoneses. La lógica detrás de esto es que estas claves son sencillas y conocidas y los usuarios que aún las emplean están expuestos a ataques maliciosos. En general las compañías siempre recomiendan cambiar las claves en cuanto se instala una red.
Con los datos obtenidos el gobierno producirá una lista de dispositivos inseguros que será compartida con las autoridades competentes y los proveedores de servicios de Internet. Luego se dará aviso a los usuarios. El plan comenzará a ejecutarse este mismo mes.
Antecedentes
Japón quiere evitar un disgusto durante el evento y la vergüenza que esto podría suponer. Existen antecedentes que sustentan su preocupación, uno de los más significativos es Olympic Destroyer. Este Malware atacó la organización de los juegos de invierno de 2018 que se realizaron en Pyeongchang, Corea del sur. Cuando los servidores dejaron de funcionar antes de la ceremonia de apertura muchos espectadores no pudieron imprimir sus entradas y asistir al evento.
