Uno de los premios que menos sorpresa generó. Y es Call of Duty es una de las grandes joyitas en materia de juegos. Buenas historias, gráficos increíbles, excelente jugabilidad. ¿Qué más se le puede pedir a un FPS? Quizás sí un desarrollo un poco más largo, pero creemos que también forma parte del “secreto de su éxito”: el dejar a los jugadores con muchas, muuuchas, ganas de más.
Modern Warfare 3 no decepciona. Arranca literalmente “con todo”. Nada de misiones “livianitas” como para recordar los mandos. Un pequeño repaso por dónde nos habíamos quedado en la segunda entrega, y de lleno a la acción, que para empezar nos sitúa en plena invasión rusa a los Estados Unidos, en un ambiente que refleja a la perfección el caos que eso implicaría.
Para variar, los escenarios son impecables, y de hecho dan ganas de gritar por una tregua de apenas unos minutos para dar un paseo y recorrer la creación de la gente encargada del arte. Igual, hay pequeños “descansos” donde uno puede dar un par de giros de cámara como para apreciar un poco sin que nos den un certero balazo en la cabeza.
Si alguna vez jugaron esta saga, no hace falta que les contemos mucho más. Una seguidilla de misiones muy variadas y empleando tecnología de última generación les espera.
La cuestión es que Call Of Duty: Modern Warfare 3 se llevó el galardón al Mejor Videojuego con el 28% de los votos.
Quien más se le acercó fue otro exponente del rubro: Battlefield 3, con el 21%. Ya bastante más lejos se posicionaron FIFA 12 (con el 13%), el esperado Batman: Arkham City (con el 12%) y Need For Speed: The Run (con el 11%).
