Elon Musk quería cambiar Twitter. Los ejecutivos y accionistas no querían los cambios de Musk. El empresario decidió que la mejor solución era entonces comprar la compañía. Hubo negociaciones, se firmo un acuerdo de compra. Estalló una guerra, subieron las tasas de interés, bajaron las acciones de la tecnológicas y Elon descubrió que Twitter no era un negocio tan genial como había pensado.
Pero el acuerdo tenía clausulas que le han permitido a Twitter demandar a Musk.
La defensa de Elon Musk se basa en la idea de que Twitter no ofreció información suficientemente confiable sobre la cantidad de bots que pueblan su red. Seamos claros en esto, Twitter tiene muchísimos bots. Pero ¿Es esta la verdadera razón de la retirada de Musk? ¿Alguien podía esperar otra cosa de Twitter?
La pausa que no fue
Elon Musk pidió el retraso del juicio señalando la complejidad de la situación a considerar. De una forma más particular, la intención del empresario era conseguir tiempo para analizar los datos sobre los bots en la plataforma.
Sin embargo, la jueza Kathaleen St. Jude McCormick de la corte de Delaware estimó que cualquier demora solo produciría un daño irreparable. Musk, apuntó la magistrada, subestima la capacidad de la corte para procesar un caso de esta complejidad rápidamente.
De esta manera la jueza le ha dado la razón a Twitter, que había pedido un juicio rápido señalando que la disputa está dañando sus negocios. El juicio podría darse en septiembre.
Arrepentimiento
El argumento de Twitter es que Musk en realidad se ha retirado luego de llegar a un acuerdo de compra poco antes de que el mercado de acciones cayera. Una gran parte de la fortuna del empresario está conformada por este tipo de activos.
