EEUU ha llegado a un acuerdo con China, comprará la mayoría de la operación de TikTook en EEUU y recibirá como licencia el algoritmo de la plataforma. El sistema recibirá un entrenamiento aparte para despegarlo de las condiciones que establecieron sus desarrolladores en el país asiático. Pero aquí surgen las sospechas, los empresarios detrás de la adquisición son todos aliados de Donald Trump.
TikTok EEUU podría quedar en manos de empresarios amigos de Trump
La versión estadounidense para Australia
Las consecuencias del trato ya se están haciendo sentir en otros países. El senador del partido liberal australiano, James Paterson, ha señalado que sería lamentable que, existiendo una versión segura en Estados Unidos, Australia siguiera utilizando la que está controlada por un gobierno extranjero autoritario. Por tanto ha postulado que el país debería adoptar la versión estadounidense de la plataforma.
El problema no es la propiedad
Sin embargo, organizaciones de derechos digitales en Australia han advertido que el problema sigue presente. No es la propiedad del medio el asunto a resolver, por lo que el cambio de manos no mejora la situación.
Tom Sulston, de la Digital Rights Watch, explica: El problema es la constante vigilancia de la base de usuarios. Los usuarios en la versión estadounidense de TikTok no gozan de más privacidad que los de la versión china, y esto se debe a la falta de regulación sobre las compañías.
Dominio y secreto
Críticos y académicos en Australia han señalado que la adquisición de TikTok por parte de grupos mediáticos tan influyentes y poderosos en EEUU no es una buena noticia. Más considerando como la red de videos cortos ha ganado cada vez mayor influencia. Además, el algoritmo seguirá siendo un secreto. Solo unos pocos dentro del grupo propietario sabrán como funciona, que criterios utiliza para recomendar contenido y a que intereses responde.
Mientras tanto, TikTok está prohibido para dispositivos gubernamentales en Australia. El gobierno señala que está observando lo que pasa en EEUU. Sería curioso que la veda se levantara a favor de la versión estadounidense.