Hoy tuvimos la posibilidad de visitar el nuevo piso que Google abrió en sus oficinas de Buenos Aires, ubicadas en Puerto Madero. Esta inauguración está en relación con el enorme crecimiento que la empresa tuvo en 2010 (¡un 80%!) y con el que pretenden alcanzar para 2011 (¡otro 80%!, según palabras de Adriana Noreña, Country Manager de Google para Argentina). En este sentido, la empresa se encuentra embarcada en un plan de contratación de miles de empleados en todo el mundo.
Además de la recorrida por las nuevas oficinas, también tuvimos la posibilidad de charlar informalmente con Daniel Helft, Gerente de Asuntos Gubernamentales y Políticas Públicas para el área de Comunicaciones y Asuntos Públicos de Google para América Latina. Algunos de los conceptos más importantes rescatados de esa charla fueron:
El proceso de selección que utiliza Google para elegir a sus nuevos integrantes es arduo. La empresa quiere a los mejores y para eso entrevista a al menos 30 personas por cada puesto a tomar.
A los empleados que ingresan a la compañía, se les otorga todo lo que necesiten (tecnológicamente hablando): notebook, celular, modem 3G, etc.
Por política de seguridad, las computadoras son siempre Apple.
Los horarios de trabajo son completamente flexibles. Incluso los empleados pueden ir a las 3 de la mañana si así lo desean. En rigor, se manejan con un esquema de objetivos mensuales a cumplir.
A pesar de que el personal contratado esta en relación con las áreas de Marketing y Ventas, se conservo el espíritu de un espacio creativo en los ambientes con el objetivo de que cada “Googler” (sí, así los llaman) pueda dar lo mejor de sí.
Las nuevas oficinas están listas para recibir la certificación LEED. Se trata de un estándar relacionado con el aprovechamiento de la energía y los recursos naturales. En este sentido, la oficina esta armada en función de tener luz natural el mayor tiempo posible, sistemas para el ahorro de agua, y muebles y otros elementos reciclados de productos desechados (como unos sillones armados en base a viejas persianas de madera).
Daniel Helft, Gerente de Asuntos Gubernamentales y Políticas Públicas para el área de Comunicaciones y Asuntos Públicos de Google para América Latina.
Y ahora si, los dejamos apreciar estas más que envidiables oficinas. Como verán, nos costo mucho encontrar espacios de trabajo (o por lo menos, espacios de trabajo como los que tradicionalmente solemos ver en cualquier oficina). ¿Qué opinan? ¿No les gustaría trabajar en un lugar así?
Inicio de la recorrida por las nuevas oficinas de Google. Un detalle: las paredes de los boxes son bajas para que los “Googlers” puedan comunicarse entre sí y apreciar el paisaje que los rodea. Algo que va en contra de las ideas más conservadores respecto a como debe ser una oficina.
El clásico vidrio con recuadros de colores que separa las oficinas del personal jerárquico.
Luego de una jornada de arduo trabajo, podremos acceder a la sala de relax.
Sí, es lo que ven: un sillon-hueco ergonómico metido dentro de pared con estantes.
Más almohadillas de colores, listas para usar y relajarse.
La sala de relax cuenta con todo el confort de un spa y una excelente vista a Puerto Madero.
Almohadillas para la clase de Yoga que semanalmente tienen los empleados a su disposición.
Algo de esto debe tener que ver con el Feng Shui, ¿no?
La biblioteca, aún con pocos libros (que son elegidos por los “Googlers”).
Cada una de las salas de reunión tienen uno de los colores del logo de Google.
Otra colorida sala de reunión. En el exterior, tienen forma de contenedores portuarios.
Cada una de las salas de reuniones, a pedido de los empleados, tiene el nombre de un barrio de la Ciudad de Buenos Aires.
Otro de los letreros que encontramos en las oficinas. Los “Googlers” suelen decirse: “nos vemos hoy a las 5 en La Boca”.
Una de las salas de reuniones por dentro.
Una de las salas de reuniones principales de Google (o al menos la más grande que vimos dentro de las oficinas).
Sala especial para madres embarazadas.
Más sobre el logo de Google en uno de los espacios de relax.