La Oficina de Derechos de Copia de Estados Unidos publicó recientemente la tercera parte de un informe sobre derechos de copia e inteligencia artificial. En dicho documento advertía que los desarrolladores de los modelos utilizaban el material protegido más allá de lo que la doctrina de uso justo permitía. Lo dicho no aparece como una gran sorpresa, pero la sentencia por parte de un organismo oficial de tal importancia es importante. Y debe haber molestado a más de uno porque al día siguiente la jefa de la oficina, Shira Perlmutter, fue despedida.
El argumento por el uso justo
El borrador se pregunta si la gran cantidad de datos de trabajos bajo derecho de copia que se toman para entrenar a las IA exige el consentimiento de los autores. Durante los últimos años las empresas creadoras de los modelos han dudado en admitir el uso del material. Luego lo han admitido, pero apuntado que los ampara la doctrina del uso justo. Esto es, que no perjudican al creador original y que su trabajo es suficientemente transformativo.
Los funcionarios estadounidenses han señalado que lo importante es ver si la actividad perjudica el valor del original. Si esto ocurre no puede aplicarse la doctrina de uso justo. Un modelo que es utilizado para el análisis o la investigación no producirá sustitutos para el material del que se alimentó. Sin embargo, cuando se utiliza de forma comercial grandes cantidades de material bajo derecho de copia para crear contenido que compite con ellos, en los mismos mercados, y sobre todo cuando el acceso es ilegal, ya no se puede aplicar la doctrina del uso justo.
Un buen golpe
Se espera que a pesar del despido la oficina publique la versión final del documento sin cambios significativos. Esto supondrá un importante golpe para las empresas en sus batallas legales con los dueños del material.
Cabe recordar que el problema de los derechos de copia ha llevado a Elon Musk ha apoyar la idea de eliminar las leyes de propiedad intelectual que propuso Jack Dorsey, el fundador de Twitter.