Es posible que el lector recuerde como hemos hablado de los envíos de chips avanzados que, pensados para otro mercados, han terminado en China. También hemos mencionado que Estados Unidos estaba considerando métodos de rastreo para monitorear el destino de este tipo de productos. Un poco más recientemente hemos sabido de las acusaciones de China contra Nvidia por la supuesta presencia de un sistema de desactivación remoto. Lo cierto es que, según la agencia Reuters, autoridades de EEUU han estado empleando dispositivos de rastreo para verificar el destino de los chips de IA.
El contrabando de placas Nvidia sostiene a las empresas de IA en China
Como dicen, la paranoia no implica que no te estén siguiendo.
Nivida niega que sus chips H20 tengan una opción de desactivación remota
La ley y la trampa
Es importante notar que según las fuentes de la agencia los rastreos no son una práctica generalizada y solo se han realizado en el caso de envíos bajo investigación. Además, los rastreadores no tienen en sí como objetivo espiar las instalaciones o equipos que van a usar los chips. Lo que interesa es ver que empresas evaden las restricciones de comercio establecidas.
Por lo general los rastreadores no están instalados en el hardware, sino en los paquetes y envoltorios que los contienen. Pero han habido casos en los que se los ha puesto dentro de los servidores. Muchos re vendedores buscan y remueven los rastreadores.
Comercio y rivalidad
El rastreo de los chips comenzó en 2022, con motivo de la imposición de restricciones a la exportación de tecnología a China. En los envíos investigados han estado involucradas las fábricas Dell y Super Micro y los chips de Nvidia y AMD.