En febrero de 2025 Google calculó que invertiría unos USD 75 mil millones en infraestructura para sus servicios en la nube. La cifra superaba ampliamente las proyecciones que habían realizado los analistas hasta el momento. Esta bestial cantidad de dinero ha sido corregida, la compañía ha señalado que podría llegar a gastar USD 85 mil millones.
Google no está lanzando dinero por capricho, la demanda ha crecido notablemente. Los servicios de inteligencia artificial en particular se han vuelto cada vez más populares. Las empresas han acelerado la implementación de la tecnología animadas en parte por los posibles beneficios y en parte por el temor de quedarse afuera del negocio o las preferencias de sus clientes.
Todo esto debe sostenerse con mayor poder de cómputo disponible y más instalaciones especializadas. Y cada vez más a mayor escala.
Demanda, oportunidades y 2026
Los resultados lo exigen. Google obtuvo unos USD 13600 millones durante el segundo trimestre gracias a su negocio en la nube. Lo que ha supuesto un aumento del 32%. Por dicha razón dos tercios de todas las inversiones realizadas en infraestructura durante el periodo estuvieron dedicadas a este negocio.
Desde la compañía ya han adelantado que a pesar de todo el esfuerzo realizado en 2025 es seguro que durante 2026 deba aumentarse la cantidad de capital puesta en juego. El motivo, se apunta, no solo es el incremento en la demanda, también aparece el crecimiento de oportunidades a través de toda la empresa. Lo dicho parece sugerir que la aplicación de la tecnología se extenderá a una gran variedad de instancias tanto para los productos como para la misma organización.