Mustafa Suleyman es el jefe de inteligencia artificial de Microsoft. Dentro de la industria forma parte del grupo de personas que tiende a ver a la tecnología como una herramienta con limitaciones y objetivos específicos, a pesar de destacar su gran potencial.
Durante un reciente evento en la ciudad de Houston, Estados Unidos, señaló a la CNBC que no pensaba que una IA consciente fuera un objetivo real. “No creo que sea un trabajo que se deba hacer. Si haces las preguntas equivocadas terminas con la respuestas equivocada. Creo que es la pregunta equivocada”.
IA y los seres humanos
Suleyman entiende que es importante tener en cuenta las diferencias que existen entre lo que ocurre con las IA y los seres humanos.
“Nuestra experiencia física del dolor es algo que nos pone tristes y nos hace sentir terrible. Pero la IA no se siente triste ni experimenta dolor”. La IA, explica, “solo crea la percepción, la narración de la experiencia de si misma y de la conciencia, pero no es lo que ella está de hecho experimentando. Lo sabemos desde el punto de vista técnico porque podemos ver lo que el modelo está haciendo”.
Así pues, la próxima vez que un robot te agreda, destrúyelo con un martillo o dispárale sin remordimiento. Este consejo es un agregado totalmente nuestro.
Consciencia y derechos
El tema de la conciencia y la IA no es menor. Suleyman explica: “La razón por la que le damos derechos a las personas es porque no queremos lastimarlas, porque sufren. Tienen conexiones de dolor y preferencias para evitar el dolor”. El ejecutivo concluye que investigar el tema de la consciencia en las IA no tiene sentido, porque no son conscientes ni lo pueden ser.






