La Junta Nacional de Relaciones Laborales de los Estados Unidos ha acusado a Google de espiar a sus trabajadores mientras estos organizaban una protesta y despedir a luego a dos de ellos.
Laurence Berland y Kathryn Spiers perdieron sus puestos en 2019. No fueron los únicos, sin embargo en otros casos la NLRB no pudo determinar una violación a las leyes laborales.
El conflicto surgió cuando Google contrató a IRI Consultants, una empresa conocida por su oposición a los sindicatos. Para los trabajadores tal asociación fue un mensaje en contra de la organización de los empleados.
Incidente
Spiers fue despedida luego de crear un mensaje pop up para los empleados de Google que visitaban el sitio de IRI. El texto señalaba: “Los Googlers tienen el derecho a participar en actividades concertadas protegidas”. Google argumentó que Spiers había violado sus políticas de seguridad.
La NLRB entiende que el despido no fue justificado.
Spiers ha señalado que su intención fue ayudar a sus colegas. El mensaje de la empresa sobre su despido ha dañado su reputación entre sus colegas y otras personas de la industria.
Si Google no llega a un acuerdo con los empleados iría a un juicio en el que podría ser obligada a pagarles los sueldos perdidos y recontratarlos.
Empleados alertas
Las protestas no son algo fuera de lo común en Google. Miles de empleados han protestado por diversos motivos en varias ocasiones, incluyendo escándalos por acoso sexual y la colaboración de la empresa con proyectos militares.
