Luego de un 2018 nefasto Bitcoin parece estar disfrutando de un periodo de bonanza durante la primera mitad de 2019. La criptomoneda ha alcanzado nuevos records, pero también ha demostrado que todavía está sujeto a cambios súbitos, no solo para la suba, sino también para la baja.
Durante esta semana el Bitcoin aumentó su valor en un 39% alcanzado los USD 13.852. Este valor prácticamente se equipara a su marca histórica, cuando en Diciembre de 2017 alcanzó los USD 13.860.
Sin embargo el miércoles perdió unos USD 1.800 en apenas 10 minutos. El jueves los vaivenes se hicieron más evidentes con subas del 4,8% y caídas del 7,3%. A este tipo de variaciones es a lo que se refieren los analistas cuando hablan de volatibilidad.
Antecedentes
Es probable que una de las causas de este momento del Bitcoin sea el temor a lo ocurrido en el pasado. Diciembre de 2017 fue el comienzo de la gran caída de la criptomoneda. En Enero de 2018 el valor se precipitó a los USD 10.166, en Abril cayó a 6.966 y en Enero de 2019 alcanzó los USD 3.441. Este mes fue también el del comienzo de la recuperación de la moneda.
Imagen: Statista
Es posible que en este momento muchos inversores se pregunten si están en el comienzo de un nuevo ciclo o si la moneda es capaz de pasar a un nuevo nivel. Como es lógico, los inversores adquieren bienes cuando están a la baja y esperan que suba su valor, no cuando está a la alta y parece tener más espacio por debajo que por encima.
Competidores, aliados y bancos
Algunos analistas creen que la caída que Bitcoin sufrió durante los meses previos a 2019 estuvo relacionada con la aparición de nuevas propuestas, como es el caso de Libra de Facebook. Sin embargo también hay quienes creen que estas nuevas opciones le han dado nueva vida al Bitcoin, y que esta moneda se ha convertido en la opción dominante del mercado.
Muchas empresas relacionadas con actividades vinculadas a la moneda virtual han visto subir sus acciones. Entre ellas Nvidia, que hace unos meses había advertido que debía separarse un poco de la criptomoneda.
Un punto clave ha sido la actitud de los bancos, que parece ser un poco menos crítica que en otros tiempos.
