El prometedor HTC One, lanzado en febrero pasado, ve jaqueada su llegada a varios de los mercados más importantes del mundo, ya que a la escasez de suministros para su cámara Ultrapixel ahora se ha sumado la falta de carcasas metálicas.
Firmas de renombre como Best Buy y Vodafone ya han sido notificadas de posibles retrasos en el envío de equipos e, incluso, de la falta de unidades para comercialización. Un ejecutivo de HTC dialogó con The Wall Street Journal y aseguró que la razón principal de los problemas de suministro es que los proveedores ya no consideran al fabricante taiwanes como un “cliente de primer nivel”. Este cambio de postura estaría relacionado por la drástica disminución de los envíos de teléfonos móviles durante 2012 y los cambios frecuentes en las fechas de despacho.
HTC se encuentra ahora con la difícil tarea de resolver los problemas con el suministro de componentes, con el fin de poder cumplir los plazos de entrega de dispositivos One, agendados para finales de marzo. El plan original de la compañía estima que en la primera semana de abril deben estar las primeras unidades disponibles en el mercado.
El problema con el flamante “buque insignia”, que reemplazará al One X, es que HTC depende en gran medida de su éxito para encausar su sensible situación financiera. Peter Chou, CEO de la empresa, incluso a puesto en juego su puesto al asegurar que si el One falla, anunciará su retiro. Una medida fundamental para mejorar la imagen de la marca y llegar a más clientes ha sido la contratación de un nuevo jefe de Marketing, que pondrá a punto cada una de las futuras campañas.
Sin embargo, hay una piedra más en el camino: Samsung. El gigante surcoreano ya anunció que los primeros galaxy S4 llegarán a las góndolas durante el mes de abril, empujados por cientos de millones de dólares en concepto de publicidad. Una cifra que se encuentra bastante lejos de las posibilidades de HTC, que en todo 2012 “sólo” desembolsó U$S60 millones en dicha área.
Fuente: AndroidCommunity.com
