Con presencia conocida en el segmento de los televisores, durante 2013 este tipo de screens asomaron su rostro en la industria de los smartphones. LG presentó Flex, con una pantalla cuya curvatura es vertical; mientras que Samsung dio a conocer Galaxy Round, un equipo que presenta con curvas hacia los lados. Ya en octubre, el sitio SamMobile afirmó que este tipo de desarrollo de Samsung es en calidad de prototipo y que tendrá una edición limitada.
Más allá de esta consideración, la divulgación de las pantallas curvas en los teléfonos móviles condujo a que analistas consideren la posibilidad de que este tipo de diseño y tecnología llegue, también, a los venideros insignia de Apple y Samsung: iPhone 6 y Galaxy S5. Ahora, el sitio Korea Herald ha citado a analistas de la industria para afirmar que los mencionados smartphones no contarán con este tipo de screen.
Una de las razones: tanto LG como Samsung están experimentando inconvenientes para producir suficientes pantallas curvas para Flex y Round, respectivamente. Por otra parte, estos equipos no han vendido un gran volumen: las ventas son pobres, según anota el sitio CNET, publicación que no duda en afirmar que “no ha explicado adecuadamente por qué los consumidores querrían un smartphone con pantalla curva”, en la creencia de que los usuarios “aman la innovación, pero precisan que les cuenten claramente cuales son los beneficios que ésta trae”.
Según uno de los analistas citados, “los (equipos) curvos serán presentados el próximo año como una variante de los Galaxy más que como un modelo insignia”. Los especialistas coinciden en que el año 2015 es una fecha más plausible para la expansión de este tipo de diseño y funcionalidad.
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