MIE, 26 / AGO / 2020

Traspie legal de Apple en su lucha contra Epic Games

Una jueza federal estadounidense dictaminó que la compañía no puede impedir el acceso a la herramienta Unreal Engine. También señaló que no existe competencia real en el ecosistema iPhone.

Este lunes una jueza federal determinó que el bloqueo de las herramientas de Epic Games en Apple no es una maniobra válida dado que perjudica a otras empresas ajenas al conflicto entre las dos grandes compañías.

Yvonne Gonzalez Rogers señaló en su dictamen que “Epic Games y Apple estan en libertad de demandarse uno al otro, pero su disputa no puede crear el caos entre los que estan a su alrededor”.

Unreal Engine es una herramienta para la creación de videojuegos de la que dependen cientos de desarrolladores para sus aplicaciones.

El enfrentamiento entre Apple y Epic Games se originó cuando los creadores de Fortnite decidieron desafiar las reglas de comercialización de la App Store. Al principio Apple simplemente sacó a Fortnite de su tienda, pero luego anunció el fin de la licencia de Epic Games lo que supone el fin del acceso para todos los programas de dicha empresa, incluyendo el Unreal Engine.

Distinción

La jueza evito un pronunciamiento mayor sobre el centro del conflicto y no exigió la restauración de Fortnite en la tienda de Apple.

Gonzalez reconoció que Epic había transgredido las reglas de la tienda de Apple con Fortnite, pero explicó que las empresas asociadas a Epic no lo habían hecho y no merecían ser castigadas con tanta severidad.

Cuestionamiento

La distinción parece en parte favorecer la acción original de Apple, sin embargo la compañía no salió bien parada. Gonzalez Rogers observó que no había competencia para la App Store en iPhone. “La pregunta es, sin competencia, ¿de donde viene el 30%? ¿Por qué no es el 10% o el 20%? ¿Cómo se beneficia el consumidor?”, apuntó.

El representante repitió la postura de Tim Cook en el congreso estadounidense, que los consumidores tienen la posibilidad de comprar un dispositivo con Android.

La jueza respondió que muchas teorías económicas señalan que el cambio de marcas supone costos para los consumidores.

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