Richard Teng, el actual CEO de Binance, ha señalado que la compañía para la que trabaja ha cambiado, y ahora atraviesa una nueva etapa de madurez reguladora. Esta es una manera muy interesante de explicar que los días en los que Binance operaba fuera de le ley han quedado en el pasado.
El ejecutivo ha señalado que lo ocurrido en esos días, que por cierto no están tan lejanos en el tiempo, estaba relacionado con ciertos problemas culturales.
El Departamente de Justicia de Estados Unidos había hecho un comentario similar de forma previa. Aunque su afirmación había sido algo más cruda al señalar que la empresa había practicado una política de moverse primero y pedir perdón después.
Nada enseña mejor que las consecuencias
Las malas decisiones tienen sus consecuencias. Para Binance están han sido la pérdida de unos USD 4300 millones en el arreglo al que llegó con el Departamento de Justicia y la renuncia de su anterior CEO, Changpeng Zhao, luego de que se declarara culpable de lavado de dinero.
La empresa ha sobrevivido, pero obviamente intenta despegarse de la mala imagen que se ha ganado. Teng explica “Hemos superado el pasado y la compañía se mueve hacia un momento de mayor madurez. Estamos buscando la sustentabilidad, la dirección en la que estamos es claramente de mayor cumplimiento, por lo que estamos construyendo un programa de cumplimiento mucho más robusto”.
Binance ha nombrado una junta de directores como parte de sus esfuerzos para tranquilizar a los reguladores. La mayoría de los miembros provienen del interior de la empresa.