Desarrolladores de la Universidad de Minnesota utilizaron tecnología de impresión 3D para crear una pantalla OLED.
Las pantalla OLED ofrecen varias ventajas. Entre ellas calidad y eficiencia energética. Además, se las puede utilizar tanto a pequeña como a gran escala, son flexibles y livianas. Sin embargo su producción suele estar vinculada a grandes complejos para los cuáles se necesita una gran inversión inicial.
La intención de los desarrolladores era ver si era posible llevar el proceso de fabricación a una impresora 3D especial cuyo costo es similar al de un Model S de Tesla. Y aunque todavía falta un camino para recorrer antes de que podamos imprimir pantallas en nuestros hogares y reemplazar de esta manera al viejo televisor, sin dudas este es un gran primer paso.
Técnicas combinadas
Dos modos de impresión fueron utilizados en combinación. Por un lado se empleó un dispensador para los electrodos, las interconecciones, el aislamiento y el encapsulamiento. En cambio, las capas activas fueron creadas con un rociador a temperatura ambiente.
Ambos procesos se realizaron con la misma impresora 3D.
Resultados
El resultado fue una pantalla de 1,5 pulgadas y unos 64 píxeles funcionando perfectamente. Tan humilde como parece en tamaño la pantalla superó las expectativas de sus creadores. El próximo objetivo es crear pantallas de mayor resolución con un mayor nivel de brillo.
