Lo que adelantaban decenas de rumores se confirmó en la noche del jueves: Google firmó un acuerdo de 1.1 mil millones de dólares con HTC para potenciar su división de hardware. Con esta transacción, la firma taiwanesa destinará gran parte de su equipo móvil al gigante de Mountain View, incluyendo a los desarrolladores de la línea de smartphones Pixel.
“Nuestros futuros compañeros de Google son gente increíble con la que ya hemos estado trabajando de cerca en la línea de teléfonos inteligentes Pixel, por lo estamos emocionados de ver lo que podemos hacer juntos como un equipo”, escribió Rick Osterloh, jefe de hardware de Google en el blog de la compañía. Además agregó que el acuerdo también incluye “una licencia no exclusiva para la propiedad intelectual de HTC”.
Peter Shen, director financiero de HTC, aclaró seguirían empleando a más de 2.000 personas en investigación y diseño después de que el acuerdo se lleve a cabo, una cifta que se encuentra por debajo de los 4.000 que tenía hasta antes del acuerdo. Eso hace que el anuncio de hoy sea más una adquisición de talento que una adquisición tradicional de recursos.
HTC seguirá adelante con su propio negocio de teléfonos inteligentes, incluso después de enviar una buena parte de su talento y operaciones a Google. Cher Wang, CEO de la empresa asiática, dijo que este acuerdo “asegurará la innovación continua de nuestros teléfonos inteligentes y de la realidad virtual con VIVE”. De hecho, el comunicado de prensa de HTC revela que la empresa ya está “preparándose activamente” para su próximo teléfono inteligente de alta gama.
Con esta operación, ya son dos las veces en las que Google ha realizado grandes compras en el mercado móvil. Hace seis años, la compañía anunció la adquisición de Motorola Mobility, por la que pagó 12.500 millones de dólares. Luego de lanzar al mercado los populares Moto X y Moto G, que significaron una verdadera lavada de cara para la firma de celulares, los activos fueron vendidos en 2014 a Lenovo por 2.910 millones de dólares, una fracción de lo que originalmente se había pagado. La operación de compra de Motorola fue vista entonces como una simple operación de compra de patentes, ya que la compañía fundada por Larry Page y Sergei Brin ha tenido decenas de litigios legales por el uso de diversas tecnologías en sus dispositivos.
Vía: Google
