Hace ya varios meses la Unión Europea ha aprobada el Acta para los Mercados Digitales (DMA). Esta ley establece una serie de criterios objetivos que tienen como finalidad identificar a aquellas empresas que actúan como gatekeepers (porteros).
El término se emplea para designar a aquellos actores dentro de un ecosistema o ambiente que tienen como objetivo impedir que otros se sumen a la comunidad. En la ley se apunta a las grandes plataformas de servicios que impiden la libre competencia.
Respuesta de las empresas
Como consecuencia de este nuevo contexto varias empresas han formado la Coalición para los Ecosistemas Digitales Abiertos (CODE). Entre los miembros del grupo se encuentran: Google, Meta y sus subsidiarias, Qualcomm, Honor, Lenovo, Motorola, Nothing, Opera y Wire.
Según estas compañías el objetivo es promover la adopción de plataformas abiertas y sistemas que impulsen el crecimiento y la innovación en Europa. También afirmaron que esperan que los sistemas digitales abiertos atraviesan diferentes industrias y promuevan la cooperación y los sistemas interoperables. El grupo trabajará con académicos, legisladores y empresarios en el contexto de la DMA y los marcos regulatorios derivados.
Mejor acompañar que seguir
En este punto el lector ya tendrá una idea clara de lo que ocurre. Muchas de las compañías mencionadas no han sido fuertes impulsoras de la interoperabilidad, o defensoras de los entornos competitivos. Pero ahora que el continente ha establecido una normativa para evitar las malas prácticas han optado por ser parte del cambio, para evitar que el cambio las golpee demasiado fuerte.
De la forma que sea, la decisión es una buena noticia.