Otra vez los senadores están en boca de todos, pero esta vez por razones que esperamos sean más frecuentes. En los últimos días los integrantes de la cámara alta plantearon una reforma a la ley Federal de Protección al Consumidor para que la Procaduría Federal de Consumidor (PROFECO) proteja a los consumidores que realizan compras electrónicas.
“Cuando otros usuarios deciden adquirir algún producto que se oferta en línea lo hacen asumiendo que tienen los mismos derechos y la protección que cuando realizan sus compras por las vías tradicionales, pero muchas de las veces terminan siendo víctimas de robos, estafas ya que enfrentan problemas a la hora de recibir esos bienes, al realizar un pedido, así como la falta de garantías y una ausencia en los reembolsos”
La reforma se puntualizaría en el Artículo 76 BIS, en sus fracciones IV y VI donde se aclarará el proveedor garantizará las practicas engañosas, que la palabra “engañosa” sea incluida en el enunciado que habla de las estrategias publicitarias y añadiendo un párrafo a la Fracción VII que obligaría a la Profeco a publicar una lista de los comercios electrónicos y proveedores usuarios que incumplan las nuevas disposiciones.
Así mismo, el legislador Ricardo Monreal, líder del proyecto señaló que los portales que son mediadores para que usuarios hagan transacciones entre ellos, nunca se harán responsables por las compras realizadas, si no se realizó la entrega, ni por la condición en que se encuentren los productos a la hora de la entrega. Mucho menos cuando no es posible localizar al vendedor fraudulento.
De acuerdo a la Asociación Mexicana de Internet los precios que un usuario encuentra en el comercio electrónico llegan a ser hasta 40% más bajos que en las tiendas tradicionales, razón más que válida para que se formalice la reforma.
