La universidad de Carolina del Norte ha descubierto un vínculo entre el uso frecuente de las redes sociales y ciertos cambios en el cerebro de los adolescentes. Las regiones afectadas son las que controlan el comportamiento impulsivo.
En el estudio participaron unos 200 jóvenes. Los involucrados reportaban su acceso a las redes sociales. Para observar la actividad cerebral se realizaron imágenes de resonancia magnética.
Resultados
Los investigadores descubrieron que los jóvenes que revisaban sus cuentas en redes sociales de forma frecuente eran mucho más propensos a activar regiones del cerebro vinculadas al sistema de recompensas. El sistema de recompensas es un grupo de estructuras neuronales encargadas de producir las motivaciones del individuo, los estímulos para sus acciones.
Se estima que como consecuencia podrían ser más susceptibles a la opinión de otros y esta hipersensibilidad cambiaría el modo en que controlan sus impulsos.
Consecuencias
Las imágenes obtenidas muestran los cambios en el cerebro. Sin embargo no alcanzan para saber si estas alteraciones son temporales o permanentes.
También es oportuno mencionar que el estudio no ha examinado el comportamiento de los jóvenes. Por esta razón no arroja datos sobre el impacto de las redes sociales en su bienestar. Las alteraciones en el cerebro no implican una alteración automática en la conducta.