Un total de 118 aplicaciones de origen chino han sido prohibidas por el gobierno indio.
La decisión es parte de una serie de acciones con diversas justificaciones pero que reflejan el enfrentamiento entre las dos naciones tanto a nivel diplomático como militar.
China e India han desplegado tropas en la región de Ladakh, Cachemira. La disputa en la frontera de los himalaya ya ha producido varias muertes.
Anteriormente el gobierno indio había prohibido unas 59 aplicaciones, entre las cuáles se encontraban algunas de las más populares, como es el caso de TikTok.
Argumentos
Entre los programas sancionados se encuentran WeChat y Sina News, que pertenecen a Baidu. Una víctima que puede sorprender a algunos es el más que popular videojuego PUBG. La versión original del juego fue desarrollada en Corea, pero la adaptación fue realizada por Tencent, una empresa de origen chino.
El Ministerio de Tecnología señaló que existían datos confiables que apuntaban a que las aplicaciones actuaban en contra de los intereses del país.
Según las autoridades varias denuncias advirtieron sobre el mal uso de aplicaciones móviles en Android y iOS para el robo y la transmisión de datos de los usuarios a servidores fuera de la India.
El ministerio explicó: “La recopilación de datos, la minería y la construcción de perfiles de parte de elementos hostiles a la seguridad nacional y la defensa de India, que en última instancia amenazan su soberanía e integridad, es un asunto de muy profunda e inmediata preocupación que requiere medidas urgentes”,
Represalias digitales
En parte suena a que India intenta reivindicar su soberanía en el ámbito digital cuando en el espacio físico la ve amenazada. Las represalias en el universo digital sin embargo tienen como objetivo combatir el dominio que las aplicaciones de origen chino tenían dentro de la economía online india.
