En una tienda de la ciudad de Osaka, Japón, un robot vigila a los compradores.
El robot no tiene como misión identificar a los posibles ladrones, en cambio les pide a los clientes que mantengan el distanciamiento social y utilicen máscaras para evitar esparcir el virus que tiene a todo el planeta en problemas.
El ingenio fue desarrollado por el Instituto Internacional de Telecomunicaciones Avanzadas de Kyoto.
Su objetivo es reemplazar al personal en estas tareas de prevención para evitar que ellos se vean expuestos.
Las pruebas comenzaron la semana pasada en la tienda del club de fútbol profesional Cerezo Osaka y se extenderán hasta fines de Noviembre, aunque existe la posibilidad de que se extiendan aún más.
Cámaras y láser
Para realizar sus tareas el robot cuenta con cámaras y sensores láser que le permiten ver como se mueven los clientes y medir las distancias que mantienen entre sí.
Aunque es capaz de identificar a quienes no están utilizando máscaras los reclamos solo los realiza una vez que el personal que lo está controlando en esta etapa confirma su observación.
Otras tareas
Además de estas tareas de prevención que realiza con sumo cuidado, el robot es capaz de orientar a los clientes cuando están en la búsqueda de algún producto.
