MIE, 3 / MAR / 2021

Suspenden el minado del bitcoin en el norte de China

Las autoridades han tomado esta decisión para reducir el consumo de energía luego de no haberse mantenido dentro de los límites establecidos por el gobierno central.

La provincia de Mongolia Interior, una región autónoma al norte de China, ha anunciado que planea suspender todos los proyectos, nuevos y ya existentes, de minado de bitcoin a partir de Abril.

Le región fue la única que en 2019 no pudo alcanzar los objetivos de ahorro energético impuestos por el gobierno central. Esta situación ha llevado a que la presión para el ahorro se intensificara.

Las empresas dedicadas al minado de bitcoin se han estado instalando en la región atraídas por los bajos precios de la electricidad. Y la actividad ha recibido nuevos impulsos por el aumento del valor de la divisa.

Nuevos objetivos

Aunque la decisión todavía está sometida a revisión, se cree que el departamento de industria y energía de la provincia la hará efectiva.

Esta es una de las medidas con la cuál se espera lograr una reducción del 3% del consumo durante 2021. Otras acciones incluyen el cierre de pequeñas empresas con tecnología antigua en los sectores del acero, el carbón, el grafito y la producción de aleaciones.

También se controlarán los tamaños de los centros de datos.

El bitcoin y el medio ambiente

La situación del bitcoin en China es curiosa. Su uso está prohibido porque se lo considera un peligro para los mercados financieros. Pero el minado está permitido.

Sin embargo a nivel internacional existe cada vez más conciencia de la huella sobre el medioambiente que produce la actividad del minado. El sistema blockchain que utiliza la criptomoneda es muy intenso a nivel energético. En otras palabras, no es sustentable.

China ha establecido como objetivo alcanzar la neutralidad en las emisiones de carbono en 2060. Es importante destacar que neutralidad no supone necesariamente cero emisiones, dado que existen esquemas de compensaciones a nivel internacional.

Sin embargo, quizás más importante, la nación quiere reducir su cuota a la mitad para 2030. Sigue siendo poco a la luz de la emergencia del cambio climático, pero quizás lo máximo que se puede esperar.

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