El modelo A de la compañía Alef Automotive ha recibido la autorización de la Administración Federal de Aviación de los Estados Unidos para realizar pruebas vinculadas a la investigación, exhibición y el desarrollo.
Aunque su versión actual todavía es calificada como un prototipo, el visto bueno de los reguladores supone que su desarrollo es lo suficientemente avanzado y confiable como para ser considerado un vehículo seguro.
Con algo de suerte, estamos un paso más cerca de un auto volador que pueda utilizarse de forma masiva.
Transformación en el aire
El modelo A se destaca por tener la capacidad para realizar despegues y aterrizajes verticales. Para que estas maniobras sean posibles cuenta con 8 hélices.
Lo más interesante sucede una vez que asciende. La cabina gira unos 90 grados y el conductor y los pasajeros se quedan mirando hacia un costado. El auto avanza de costado cuando vuela. Lo que tiene mucha lógica dado que las 8 hélices se inclinan para que pueda moverse de esta manera, y esto sería más complicado si la mitad quedara en la parte de atrás. Para acomodar mejor a la tripulación la cabina compensa la inclinación de la estructura principal.
La autonomía del vehículo es de unos 320 kilómetros por tierra y unos 170 kilómetros volando.
