La Reserva Federal, la Corporación Federal de Seguro de Depósitos y la Oficina del Supervisor de la Moneda de los Estados Unidos han advertido sobre los peligros de las criptomonedas. Las entidades afirman que los recientes fallos en las firmas del sector las han llevado a revisar con mayor cautela las propuestas de los bancos para su participación en el mercado.
Entre los aspectos que remarcaron los reguladores se encuentran: La volatilidad del mercado, la incertidumbre legal, debilidad en el manejo de riesgos a nivel ejecutivo y la gran cantidad de estafas y fraudes.
Ni prohibido ni desalentado, pero tampoco recomendado
En una declaración conjunta, las entidades afirmaron: “Es importante que los riesgos del sector que no pueden ser mitigados o controlados no se trasladen al sistema bancario”. Sin embargo, se aclaró también que los bancos no tienen prohibido ofrecer estos servicios, tampoco se los desalienta. Deben ofrecer medidas de seguridad que protejan a sus clientes y atenerse a la leyes vigentes.
Desde algunos sectores de la industria de las criptomonedas se ha apuntado que muchos de los riesgos señalados por las entidades reguladoras están relacionados con malas prácticas. La tecnología y la propuesta en sí funcionan.
Una zona gris y peligrosa
Lo curioso de la situación es que para la Comisión de Bolsa y Valores la mayoría de las criptomonedas son valores no registrados, por lo que representan un riesgo legal para las empresas que operan con ellas. Los resultados de las entidades que han apostado por las criptomonedas no han sido buenos.