El pasado mes de mayo, el juez Leonard Davis había dictaminado que el gigante del software no podía seguir comercializando su procesador de textos, ya que infringía una patente de la compañía I4i, relacionada con el formato XML y luego en agosto dispuso una orden judicial pendiente de apelación que ahora se resuelve a favor de I4i.
Tal como les habíamos adelantado, Microsoft en su momento había comunicado que iba a apelar la decisión, pero el recurso legal no le sirvió para convencer a la justicia que finalmente falló que la empresa no podrá vender su programa Microsoft Office en territorio estadounidense.
Además, el Tribunal de Apelaciones sentenció que la empresa actualmente dirigida por Steve Ballmer deberá abonar 200 millones de dólares a I4i en concepto de daños y perjuicios, aunque la firma canadiense ya habia sido resarcida con 240 millones de dólares también en conceptos de daños.
La medida afecta a Word 2003 y 2007, que son las que incorporan un código XML personalizado que infringiría la patente 5.787.449 de I4i. De esta forma, los archivos con extensiones .docx, .docm y .xml podrán ser abiertos con el popular programa, pero los elementos XML no podrán ser modificados.
Según el portal Cnet, ante la sentencia definitiva Microsoft intentará actuar rápido y eliminar la característica problemática de todas sus copias de Microsoft Word 2007 que se venderán a partir del 11 de enero de 2010.
Por otro lado, los ejemplares que se comercializaron previamente al dictamen no están afectados por la orden judicial y Office 2010 “ya está diseñado para no infringir la tecnología”, afirmaron desde la compañía de Redmond donde también se plantean intentar tirar de algún otro recurso legal para ganar tiempo.