Sony es una de las compañías más grandes del Japón y todo un símbolo de una era de progreso de manos de la tecnología. Quizás no sea una coincidencia que la empresa esté en crisis, a pesar de su vuelo internacional, cuando Japón viene pasando una etapa de declive. El 2011 fue especialmente desastroso para Sony, pero el periodo siguiente, desde mediados de 2012 hasta abril de 2013 resultó mucho mejor. Las perspectivas para el próximo periodo que termina a principios de 2014 son positivas.
Este año tuvo en la unidad de smartphones su mejor desempeño, ya que las ventas alcanzaron las 33 millones de unidades. Esta cifra supuso un aumento del 100% respecto a lo obtenido anteriormente, aunque lo deja todavía muy lejos de los líderes del mercado. Apple vendió 130 millones y Samsung 106 millones. El problema es que la empresa tiene que solucionar varios límites para su crecimiento, entre ellos una pobre red de distribución en los Estados Unidos y China. Los pronósticos para este año suponen que las ventas de smartphones treparan hasta los 42 millones de unidades.
Con este crecimiento Sony estaría capturando el 4% del mercado mundial. Un campo problemático para la compañía es el de los videojuegos, espacio con el que siempre hemos relacionado la marca. El mercado para Sony ha caido un 12,2%. La venta de consolas solo ha llegado a las 16,5 millones de unidades para las PS3 y PS2, y 7 millones para las Vita. Para este año las perspectivas son aún menos positivas, con un estimado de 10 millones y 5 millones respectivamente. Lo que todavía queda por ver es como le irá a la PS4.
Sony no ha tenido mucha suerte con sus televisores, aunque durante el año fiscal que terminó en 2012 vendió 19,6 milones de unidades, en 2013 esta cantidad se redujo a 13,5 millones. En el caso de las cámaras digitales el declive ha sido producto de su reemplazo casi natural por parte de los smartphones. Al menos en lo que se refiere al usuario promedio.
