Silvergate es un banco estadounidense que opera con criptomonedas. En los últimos meses de 2022 sus clientes han retirado el equivalente a unos USD 8 mil millones en monedas digitales. Estos movimientos coinciden con la caída de FTX, uno de los espacios de intercambio más importante del mundo cripto.
El dinero retirado alcanza los dos tercios del total de los depósitos. Para mantener su liquidez Silvergate ha tenido que vender bienes por un total de USD 5,2 mil millones. También ha tenido que reducir su personal un 40% y ha sufrido una pérdida de USD 718 millones.
Una advertencia tardía
Hace poco varias entidades reguladoras estadounidense advirtieron a las entidades bancarias sobre los riesgos de las criptomonedas. La falta de regulación, malas prácticas, prevención insuficiente, fraude y la inestabilidad del mercado eran algunos de los puntos señalados.
EEUU: Reguladores advierten a los bancos sobre los peligros de las criptomonedas
Pocos bancos se han comprometido tanto con el sector como Silvergate. Como suele ocurrir tomar riesgos supone encontrar oportunidades. Las empresas dedicadas a las criptomonedas necesitaban los servicios de las instituciones bancarias, y no siempre los conseguían.
¿Filtro evolutivo?
En el mejor de los casos la industria de las criptomonedas puede pensar que este invierno cripto es una especie de momento filtro. Las empresas más resistentes sobrevivirán y las que no hayan heho bien su trabajo desaparecerán, dejando importantes lecciones para las demás.
En este sentido, al menos hasta el momento, la resistencia de Silvergate es un buen signo. Aunque sin dudas el impacto ha sido más que doloroso.
