Según un reporte del The New York Times una coalición de fiscales estatales ha lanzado una investigación sobre el modo en que Instagram afecta a los adolescentes.
La preocupación principal es que Meta se estaría enfocando en promover la red social a una población cada vez más joven, sin tener en cuenta los riesgos que en ocasiones estos espacios pueden tener para la salud mental y física de algunos usuarios.
Tal postura iría en contra de las leyes de protección al consumidor de los estados involucrados.
Instagram y los jóvenes
A los investigadores les preocupa en especial las técnica que la red social utiliza para intentar mejorar la frecuencia y la duración de las interacciones de los adolescentes. Documentos de la propia compañía que fueron filtrados muestran que Meta sabía del efecto perjudicial en este segmento de la población. Especialmente en las mujeres.
Entre las consecuencias listadas aparece la depresión y el daño auto infligido.
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La respuesta Meta
Meta ha señalado que la filtración pone los datos fuera de contexto. Las acusaciones, se apunta, son falsas y muestran un profundo mal entendido de la situación.
La compañía resalta que ha trabajado para evitar este tipo de incidentes que atribuye a la Internet y la industria en general. También ha apuntado que ha dejado en suspenso el plan para Instagram Kids.
