La escasez de chips es un problema con el que tendremos que lidiar durante un buen tiempo. Una de las industrias más afectadas es la automotriz. En el caso de BMW esto ha supuesto la salida al mercado de vehículos algo menos inteligentes de lo esperado, dado que no están preparados para utilizar Android Auto o CarPlay.
Afortunadamente este inconveniente es solo temporal.
Junio a más tardar
BMW ha incorporado un nuevo proveedor. Los chips que esta empresa ofrece no están listos para soportar los sistemas mencionados. Sin embargo, se espera que en una próxima actualización de software esta falencia se resuelva.
La compañía ha explicado que ha preferido evitar retrasar el envío de las unidades. En cambio, se ha optado por suministrar los vehículos informándoles a los usuarios que las opciones para los sistemas de Aple y Android, así como el Wifi, estárán disponibles en Junio a más tardar.
BMW no ha dado muchos detalles sobre las unidades afectadas. Compradores de Estados Unidos, Italia, España, Francia y el Reino Unido ha recibido vehículos con funciones reducidas. En compensación, la compañía les ha otorgado un crédito de USD 500.
Problemas con los chips para todos y por unos años
BMW no es la única empresa de la industria afectada por la falta de componentes. Tanto GM como Ford han tenido que descartar algunas de las funciones de sus vehículos.
Según el CEO de Intel, Pat Gelsinger, la escasez de chips que afecta a las industrias podría persistir hasta 2024.
