Ayer, un juez dictaminó que la compañía dirigida ahora por Steve Ballmer no puede seguir comercializando la herramienta debido a que infringe una patente relacionada con el formato XML.
Leonard Davis era quizás un juez texano común y corriente hasta el día de ayer, cuando decidió fallar en contra de Microsoft y prohibirle la venta de su herramienta Word 2003 y Word 2007 en todo el territorio de los EE.UU.
La resolución llegó luego de dos años, cuando una compañía canadiense llamada Infrastructures For Information (i4i) argumentó que el relleno de Redmond había infringido su patente nro 5.787.449. La firma fue resarcida con unos 240 millones de dólares en conceptos de daños.
Técnicamente, el dictamen señala que la compañía no puede seguir comercializando o importando desde o hacia los Estados Unidos cualquier producto MS Word que posea la capacidad de manejar archivos .XML, .DOCX, DOCM; incluso aquellos que contengan XML.
La orden del juez establece un plazo de 60 días para que la compañía acate la medida, claro que Microsoft ya comunicó que apelaría a la decisión.