Amazon ha restringido los resultados vinculados a productos para la comunidad LGBT en los Emiratos Árabes Unidos. Esta acción se llevó a cabo luego de que las autoridades de dicho país presionaran a la compañía con posibles sanciones.
Las uniones del mismo sexo son ilegales en los emiratos, como también lo es expresar una opinión favorable para la comunidad LGBT.
Etica, dinero y pragmatismo
Las declaraciones de Amazon al respecto de lo ocurrido y la decisión adoptada son las esperadas en cualquier empresa que opera en un país con estas restricciones. Una manifestación de la realpolitik y los cruces de intereses.
“Como compañía estamos comprometidos a la diversidad, la igualdad y la inclusión. Y creemos que los derechos de la comunidad LGBT deben ser protegidos (…) Las tiendas de Amazon alrededor del mundo cumplen las leyes locales y regulaciones de los países en las que operan”.
La realpolitik es la diplomacia que considera las circunstancias y las opciones disponibles antes que los principios y la ética. Las empresas no actúan diferente al modo en que lo hacen los gobiernos. China ha sido acusada numerosas veces de violar los derechos humanos. Sin embargo, aún los países que la acusan mantienen lazos comerciales. Empresas como Apple han tenido que adaptarse a las exigencias de las autoridades locales.
¿Principios o marketing?
Sin embargo, es un problema aparte el hecho de que muchas compañías expresan su apoyo a causas vinculadas a los derechos humanos. Pero luego no toman una posición en los sitios donde haría la diferencia. Al final todo parece ser una cuestión de marketing.
