Zuk Edge es la más fresca adición al catálogo móvil de Lenovo. Se trata de un smartphone que se inscribe en la alta gama del sector, aunque tal como nota The Verge algunas de sus especificaciones quedan cortas pensado en los teléfonos insignia que se preparan para salir al ruedo en 2017. Por ejemplo, su procesador y su resolución quedarán relegados ante la llegada de nuevos chips Snapdragon y el batallón de móviles con 2K.
Lenovo Zuk Edge se destaca por su cuerpo en el cual la pantalla se estira lo máximo posible hacia los laterales, sumándose así a una tendencia que tiene como uno de sus exponentes de éxito al Xiaomi Mi MIX. En este caso, la relación cuerpo-pantalla es del 86.4 por ciento, según señala el fabricante; aunque Xataka Android dice que el ratio real es cercano al 78 por ciento. En este punto hay que tener en cuenta que en el extremo inferior hay espacio para un lector de huellas y en el superior se ubica la cámara frontal, que es de 8MP.
Zuk Edge se ofrecerá en dos colores clásicos: negro y blanco.
El smartphone toma potencia de un procesador Qualcomm Snapdragon 821 y se ofrecen alternativas de 4GB y 6GB de RAM. La capacidad para almacenamiento nativo es de 64GB y, mala noticia, no dispone de ranura microSD para poder extenderla. Zuk Edge cuenta con una pantalla de 5.5 pulgadas y su resolución es Full HD, ítem que subraya The Verge en su crítica al producto. ¿Qué más? Su cámara principal es de 13MP, cuenta con conector USB Type-C, y una batería de 3,100mAh con el sistema de carga veloz de Qualcomm. Ajustándose a los tiempos que corren, el dispositivo llega corriendo de fábrica con Android Nougat.
Se espera que Lenovo Zuk Edge debute el 1 de enero, partiendo de un equivalente aproximado a los US$360.
