En un movimiento estratégico a través del cual algunos proveedores de Internet de banda ancha planean compensar el costo por haber tenido, según dicen, las tarifas congeladas desde 2002, distintos servicios de banda ancha se suman a los efectos inflacionarios subiendo un 10% el precio de su abonos.
Así, operadoras como Telecom y Telefónica que brindan Arnet y Speedy, respectivamente, y el grupo Clarín que ofrece Fibertel, anunciaron un aumento en sus tarifas para las velocidades de 640k, 1 mega y 1.2 megas.
En el caso de Arnet se trata del segundo aumento que aplica la empresa en el año, ya que el primero ocurrió en marzo, cuando llevó el costo de la conexión de 1 mega de los $ 69.90 a los $ 79.90, mientras que dentro de dos meses el servicio tendrá un valor de $89.90.
Por otro lado, Speedy también había subido sus abonos un 10% el mes anterior, en tanto que Fibertel asignó la misma suba el pasado mes de julio en sus promociones, como sucedió con la promoción que ofrece una velocidad de 3 MB por seis meses, que pasó de tener un precio de $ 34 a costar $ 44.
No obstante estos aumentos, la cantidad de usuarios de banda ancha cada vez es mayor según los últimos datos del Indec(K), para los que en julio las suscripciones de banda ancha se incrementaron un 47.7%, hasta llegar a los 2.5 millones, mientras que los pedidos de conexiones dial up bajaron un 25.4%.
