La NASA ha creado un grupo para la investigación de los fenómenos aéreos no identificados. La idea es evaluar con rigor científico eventos que de principio no hayan podido ser atribuidos a aeronaves o condiciones naturales. El estudio se enfocará en la identificación de datos recabados, la evaluación de las mejores metodología para la recopilación de datos y como mejorar la comprensión científica de estos fenómenos.
Objetivo
No, lamentablemente la NASA no está preocupada por un creciente número de objetos voladores no identificados y una invasión extraterrestre.
La agencia espacial tiene un motivo más simple y práctico. La comprensión de estos fenómenos es un elemento clave para la seguridad nacional y para la seguridad de las aeronaves en los Estados Unidos. Establecer cuáles de estos incidentes son naturales es clave para el desarrollo de cualquier medida de mitigación.
Es importante notar que el término utilizado es UAP, que es algo más amplio que UFO, aunque se utilicen casi como sinónimos. Uno implica fenómenos aéreos, el segundo objetos voladores. El primero, se puede decir, incluye al segundo.
Fenómenos aéreos no identificados.
Una aproximación científica
El equipo de trabajo estará liderado por el astrofísico David Spergel. Spergel señala que el primer paso es recolectar la mayor cantidad de datos posible. Para eso se considerarán organizaciones no gubernamentales, agencias del gobierno o incluso civiles. Se ha calculado que el trabajo podría tomar unos 9 meses.
La idea es establecer una aproximación científica a la observación y análisis de los fenómenos. El grupo consultará a expertos en diversas ciencias, aeronáutica y análisis de datos. El reporte final, así como los datos recabados, serán compartidos con el público. Hasta ahora el estudio de estos eventos ha sido limitado, aunque hay un par de programas gubernamentales anteriores. Lo cierto es que el interés por los ovnis y los eventos extraños es enorme.
